No cabe duda de que las mayores economías latinoamericanas crecerán este año. O al menos eso indica la última edición del informe del Fondo Monetario Internacional, ‘Perspectivas de la economía mundial‘, divulgada esta semana. Mientras la entidad financiera proyecta un crecimiento del 5,9% a nivel mundial para 2021, en América Latina y el Caribe el promedio se sitúa en un 6,4%, una mejora de 1,8 puntos porcentuales con respecto a las previsiones del pasado abril. Así, el escenario se presenta más optimista que en 2020, cuando el producto interno bruto de esta región se contrajo nada menos que un 7%, en gran parte debido a la crisis económica que trajo aparejada la pandemia.
Si analizamos a las seis mayores economías latinoamericanas –Brasil, México, Argentina, Colombia, Chile y Perú, en orden de magnitud según su producto interno bruto (PIB) de 2020– Chile es el mercado que se espera crezca al mayor ritmo en 2021, con una tasa del 11%, casi cinco puntos porcentuales más que lo esperado en abril de 2021. Curiosamente, el país con el mayor PIB de la región registra el menor crecimento esperado de las seis principales economías. Brasil está pronosticado a crecer un 5,2% este año, una clara mejora respecto a las previsiones de abril, que auguraban un 3,7%. Aun así, de estos seis países, Brasil es el que menos sufrió los embates económicos de la pandemia de COVID-19, con una recesión de alrededor del 4% en 2020, cuando Argentina, por ejemplo, registró una caída del 10%.
Perú se ubica en segundo lugar según su crecimiento proyectado para 2021, con un alza del 10%. Le siguen Colombia (7,6%), Argentina (7,5%) y México (6,3%). De acuerdo con las previsiones del FMI, cinco de las seis mayores economías latinoamericanas también experimentarán tasas de crecimiento superiores al 2% en 2022 y 2023, excepto Brasil en 2022 (1,5%) y Chile en 2023 (1,9%).